El desarrollo de nuevos conocimientos, que vayan a la vanguardia de las tecnologías y el dinamismo que caracteriza a la comunidad científica, es, sin duda alguna, una tarea importante y compleja. Los tiempos de recopilación de datos y antecedentes que construyen nuevas cajas de información, son extensos y exigen largas jornadas de análisis, en las cuales se procesan datos y establecen bitácoras que registran los resultados.
En el área de la Física de Partículas, uno de los objetivos del Instituto Milenio SAPHIR, es la recopilación de datos, almacenamiento y posterior análisis. Por ejemplo, el Gran Colisionador de Hadrones (LHC) en CERN, registra el paso de cada partícula como una serie de señales electrónicas, y que son enviados a un centro de datos para realizar una reconstrucción digital.
En este contexto, y gracias a la colaboración internacional con la Universidad de Nápoles Federico II, y a la gestión del Profesor Titular de dicha institución, Giovanni De Lellis, es que el instituto Milenio SAPHIR cuenta con un microscopio ensamblado y configurado con un software llamado: “Large Angle Scanning System for Opera” (LASSO), el cual permite estudiar oscilaciones de neutrinos -muónicos a tauónicos.
A cargo de esta tarea se encuentra Martin Bastías Görlich (24 años), estudiante de pregrado de Ingeniería Física en la Universidad Andrés Bello. Martín está a cargo de monitorear la toma de datos y del posterior análisis de muestreo. “El poder trabajar con este microscopio fue determinante para mi interés en el área, no solo por el análisis de partículas, sino por las posibles aplicaciones. Esta es mi primera aproximación con partículas subatómicas; lo que siempre veo en los cursos de manera teórica, acá (en SAPHIR), por primera vez, lo veo desde un escenario experimental”, explica el estudiante.
Monitoreo, calibración para cada muestra y el ingreso de los parámetros al sistema, son algunas de las tareas de Bastías con el microscopio. En ese sentido, agrega: “Me gustaría seguir trabajando con esta máquina, sobre todo por su desempeño en aspectos de escaneo y por la gran capacidad de generar datos que posee, los que pueden ser aplicados en áreas como: geología, medicina, cosmología, nanoestructuras y análisis de materiales, entre otras. Por otro lado, este microscopio ya se ha utilizado para analizar placas de emulsión, radiografía de muones y ha tenido aplicaciones en física médica, así que ´¿para qué detenerse ahí?´. Son muchas sus aplicaciones. Eso es lo que me parece tan interesante”, enfatiza.
De cara a su próximo viaje a CERN, el joven señala que: “Es un sueño llegar allá”, y sus expectativas se relacionan con enriquecer su conocimiento científico y ampliar sus redes de contacto. “Voy con ganas de aprender tanto de las experiencias profesionales como personales de los investigadores en CERN”, finaliza.